- Quien no vive en paz con Dios, no puede tener paz consigo mismo ni con los demás.
- ¡Qué consolador resulta el padrenuestro que rezamos por la mañana y a la noche, qué gusto da pensar que tenemos en el cielo un padre que piensa en nosotros!
- Nadie puede ser católico, si no está unido al Papa.
- Un trocito de paraíso lo arregla todo.
- Cuando escribáis a vuestro padres, decidles que todos los que tienen hijos Salesianos e Hijas de María Auxiliadora serán salvos, todos, hastala tercera y cuarta generación.
- Del prójimo hay que hablar bien o callar.
- El secreto del éxito parroquial es cuidar de los niños, asistir a los enfermos, querer a los ancianos.
- Es preciso tener como compañera inseparable a la paciencia.
- Piensa de Dios según la fe, del prójimo según la caridad y de ti sengún la humildad.
- Perdona todo a todos, a ti no te perdones nada.
- La oración es para el alma como el calor para el cuerpo.
- Los bienes de los sacerdotes son patrimonio de todos los pobres.
- El Señor siempre envía grandes socorros para las grandes necesidades.
- La pureza es muy particularmente el premio de la humildad.
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