MARÍA, MEMORIA VIVA
Celebrar la memoria de María es afirmar contra todo pronóstico que "en el corazón y en la vida de nuestros pueblos late un fuerte sentido de esperanza, no obstante las condiciones de vida que parecen ofuscar toda esperanza.
Celebrar la memoria de María es celebrar que nosotros, al igual que Ella, estamos invitados a salir e ir al encuentro de los demás con su misma mirada, con sus mismas entrañas de misericordia, con sus mismos gestos. Contemplarla es sentir la fuerte invitación a imitar su fe.
Homilía, 12 de diciembre de 2016
Festividad de Nuestra Señora de Guadalupe