NATIVIDAD DE LA BIENAVENTURADA VIRGEN MARÍA
FIESTA
Fiesta de origen oriental que penetra en Occidente en el siglo VII, bajo el papa Sergio I. La Iglesia celebra hoy con alegría la fiesta del nacimiento de la Virgen María, hija de David, hija de Abrahán, nacida del pueblo judío. De ella salió el sol de justicia: Cristo, el Señor. María ocupa, pues, un lugar único en la historia de la salvación.
"DE ESTA MANERA"
Dios pudo haber salvado al hombre de múltiples maneras o simplemente no hacerlo. En su infinita misericordia, estableció un plan en el que los prodigios de su intervención asombrarían incluso a los coros angélicos. Recordar hoy el nacimiento de María Santísima es reconocer las maravillas con que Dios sigue bendiciendo a los hombres, también hijos de la Madre admirable.
HIMNO DE LAUDES
Niña de Dios, por nuestro bien nacida;
tierna, pero fuerte, que la frente,
en soberbia maldad endurecida,
quebrantasteis de la infernal serpiente;
brinco de Dios, de nuestra muerte vida,
pues vos fuisteis el medio conveniente
que redujo a pacífica concordia
de Dios y el hombre la mortal discordia.
Creced, hermosa planta, y dad el fruto
presto en sazón, por quien el alma espera
cambiar en ropa rozagante el luto
que la gran culpa le vistió primera.
De aquel inmenso y general tributo,
la paga conveniente y verdadera
en vos se ha de fraguar: creced, Señora,
que sois universal remediadora.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu,
por los siglos de los siglos.
Amén.
MEDITACIÓN
"MARÍA, DE LA CUAL NACIÓ JESÚS,
QUE ES LLAMADO CRISTO"
Hoy celebramos el nacimiento de la bienaventurada Virgen María de quien ha nacido el que es la vida de todos. Hoy ha nacido la Virgen de quien ha querido nacer el que es la salvación de todos, a fin de que aquellos que nacían para morir pudieran renacer a la vida. Hoy ha nacido nuestra nueva madre, la que ha aniquilado la maldición de Eva, nuestra primera madre; así, por ella, heredamos ahora la bendición los que, por nuestra primera madre, nacimos bajo la maldición.
Sí, ella es verdaderamente una madre nueva, la que ha rejuvenecido a los hijos envejecidos, la que ha curado el mal de un envejecimiento hereditario... Sí, ella es una nueva madre, ella que, permaneciendo virgen, ha dado a luz un prodigio tan nuevo, ella que ha dado la vida a aquel que ha creado el mundo... ¿Te preguntas cómo una virgen ha dado a luz al Salvador? Pues igual que la flor de la viña que propaga su perfume... Así como la flor no se altera al propagar su perfume, así tampoco lo pureza de María por haber dado fruto: el Salvador... Si guardas la castidad a la perfección, no solo tu carne florecerá de nuevo, sino más aún, una santidad que viene de Dios se desarrollará sobre todo tu ser. Toda tu persona quedará adornada con las flores de la gracia de la pureza.
BEATO GUERRICO DE IGNY
Abad cisterciense (Ca. 1080-1157)
HIMNO DE VÍSPERAS
Vino a la vida para que la muerte
dejara de vivir en nuestra vida,
y para que lo que antes era vida
fuera más muerte que la misma muerte.
Vino a la vida para que la Vida
pudiera darnos vida con su muerte,
y para que lo que antes era muerte
fuera más vida que la misma vida.
Desde entonces la vida es tanta vida
y la muerte de ayer tan poca muerte,
que si a la vida le faltara vida
Y a nuestra muerte le sobrera muerte,
con esta vida nos daría tal vida
para dar muerte al resto de la muerte.
Amén.