sábado, 2 de enero de 2010

MARÍA, AUXILIO DE LOS CRISTIANOS (2 DE ENERO, EN GRANADA)


En Granada (Andalucía, España), en 1492 el Arzobispo Fray Hernando de Talavera, compuso una liturgia en honor de María Auxiliadora, como gratitud a la Virgen por la Toma de Granada por los Reyes Católicos y por la restauración de la Iglesia. Desde entonces, el dia 2 de Enero se celebra en esta ciudad y diócesis la fiesta en honor de "MARÍA, AUXILIO DE LOS CRISTIANOS"


Felicitamos desde aquí a todas las ADMAs de Granada que, acaban de celebrar el primer aniversario de la llegada de MARÍA AUXILIADORA

BELÉN


Estaba la Virgen María

meciendo el pesebre en Belén,

brizándole a Dios que dormía,

estribillo del brizo era amén.


Soñaban el buey y el borrico,

soñaban con la creación,

y Dios, ¡ay qué niño tan rico!,

dormía sin ensoñación.


El alba del tiempo apuntaba,

vestía a los sueños de luz,

soñaba la Virgen María,

cantaba soñando la cruz. Amén.

EL DIOS ETERNO HECHO HIJO DE MARÍA


¿Qué significa proclamar a María "Madre de Dios"? Significa reconocer que Jesús, el fruto de su vientre, es el Hijo de Dios, consustancial al Padre que lo ha engendrado desde toda la eternidad. ¡Un gran misterio, un misterio de amor! Él, el Hijo único del Padre, se ha hecho uno de nosotros. De esta suerte "la etenidad ha entrado en el tiempo", y la sucesión de años, siglos y milenios no es un ciego viaje hacia lo desconocido, sino un camino hacia él, plenitid d elos tiempos y finalidad de la historia.


Honrando a la Santísima Virgen como la Madre de Dios, queremos igualmente subrayar que Jesús, el Verbo eterno hecho carne, es el verdadero "hijo de María". Ella le ha dado un humanidad plena; ha sido su madre y su educadora, le ha comunicado la dulzura, la delicada fuerza de su temperamento y las riquezas de su sensibilidad. Maravilloso intercambio de dones: María, que en cuanto criatura es primeramente una discípula de Cristo y al mismo tiempo es rescatado por él, ha sido escogida para ser su Madre y así modelar su humanidad. En la relación entre María y Jesús se realiza, de manera ejemplar, el sentido profundo de la Navidad: Dios se ha hecho semejante a nosotros para que nosotros lleguemos a ser, en cierta manera, como él.


Juan Pablo II

A LA MADRE DE DIOS


En tus manos la paz hace su nido,

dulce paloma de amor, serena

Madre de Cristo-Paz, pura azucena

en vuelo virgen de alto azul florido.


Tú engendraste el amor y Tú has querido

darnos la paz que quita toda pena,

Virgen, Madre de Dios, rica colmena

de paz para este mundo dividido.



Vuelve tus ojos de piedad, María,

a este inhóspito páramo de tierra,

falto de paz y falto de alegría.


Y haz que los hombres, al sentirse hermanos,

encuentren más allá de toda guerra,

esa dulce paloma de tus manos. Amén.