¡Oh Reyes Magos benditos,
pues de Dios sois tan amados,
sed mi guarda y abogados!
Sed mi guarda en este suelo
porque en sus lazos no caiga
y abogados en el cielo
porque a veros allá vaya;
porque por vosotros haya
gran perdón de mis pecados,
sed mi guarda y abogados.
Tanto quiso Dios amaros
por vuestro merecimiento
que le plugo revelaros
su sagrado nacimiento;
pues le tenéis tan contento
y con Él sois tan privados,
sed mi guarda y abogados.
Vinisteis desde Oriente
a adorar al Rey divino
con aquel alto presente
para quien de Él era digno;
caminasteis de continuo
por una estrella guiados,
sed mi guarda y abogados.
Sirviénronle los pastores
por Pastor de tantas greyes
y vosotros mis señores,
por mayor Rey de los reyes;
pues del Dador de las leyes
sois tan queridos y amados,
sed mi guarda y abogados. Amén.
No hay comentarios:
Publicar un comentario