¡Señora, limosna! Muy malo he sido, pecador; muchas ofensas he hecho a Dios; no tengo cara para parecer; no tengo ojos para hablar de vuestro Hijo. Limosna os pido. Rogad por mí, alcanzadme perdón, rogad a vuestro Hijo bendito por mí.
San Juan de Ávila