26/06/2010 Paco Chávez
La localidad onubense ofreció un justo homenaje a las Hermanas Franciscanas Misioneras de María, justamente cuando se cumplen 37 años desde su llegada a Pozo del Camino, en el 1973.
La marcha inminente de las cuatro monjas que quedan en su modestísima residencia de Pozo del Camino, reclamadas por sus superioras, ha provocado que se les hiciera este sencillo reconocimiento a su labor durante esos años, donde han compartido con los pozocamineros lo bueno y lo menos bueno que tuviera esa buena gente de la querida barriada.
A poco de llegar, se extendieron también a nuestra ciudad, viviendo en un piso en la barriada de la Punta del Caimán, en la calle del profesor Ramón Noya. Hace unos años, las que vivieron en Isla Cristina, fueron reclamadas por su casa matriz, y dejaron, con el buen sabor de quienes se dedican por amor a servir a los demás; siendo, como en Pozo, el paño de lágrimas de cuantas personas acudieran a ellas. De ellas partió la idea de fomentar el trabajo con los drogodependientes, a los que dedicaron su mayor esfuerzo; y del que los isleños, pudieron aprovecharse para iniciar su recuperación y su reencuentro con la vida.
Sin embargo, algunas de estas monjas sí continuaron en el Pozo del Camino. Justamente hasta estas fechas en que les toca marcharse de manera definitiva.
La Eucaristía, en la que participaron nueve sacerdotes, fue muy emotiva. Dentro de su sencillez franciscana, las hermanas no querían ningún acto en el que se ponderara y destacara su labor. Pero no pudieron evitar que les llegara el calor de su familia grande de Pozo del Camino y también de Isla Cristina.
La Hermandad de María Auxiliadora le hizo entrega a las cuatro de sendas fotos de la Patrona de Pozo. Del mismo modo los Ayuntamientos de Isla Cristina y Ayamonte las obsequiaron con las medallas de la Virgen del Carmen y de las Angustias.
Y por fin, en la tapia que da al jardín en el lugar donde las ‘monjitas’ han residido todos estos años, se colocó una cerámica, ofrecida por la Parroquia, que fue descubierta por ellas y que las emocionó mucho, escapándoseles unas lágrimas. “Al fin”, como comentaba una de ellas, “somos humanas, y nos emocionamos como cualquiera”. No en vano dejan un lugar donde se han sentido como en su propia casa, parte de una familia muy querida. Muchos aplausos, cuando el párroco que las asiste, bendijo este hermoso recuerdo que perdurará por muchos años entre los pozocamineros.
Un día de emoción gozosa porque hemos compartido con ellas momentos hermosos y nos hemos beneficiado de su generosa entrega; pero también momento de nostalgia y de tristeza porque Pozo del Camino, pierde una de sus más entrañables joyas de identidad.
FE DE ERRATAS:
EL AZULEJO FUE SUFRAGADO POR LA ARCHICOFRADÍA DE MARÍA AUXILIADORA
LA ARCHICOFRADÍA TAMBIÉN LES REGALÓ UN ROSARIO PARA CADA UNA DE MARÍA AUXILIADORA.
EL AYUNTAMIENTO DE ISLA CRISTINA OBSEQUIÓ A LAS HERMANAS SENDAS MEDALLAS DE MARÍA AUXILIADORA
EL AYUNTAMIENTO DE AYAMONTE TAMBIÉN LAS OBSEQUIÓ CON UN ROSARIO DE LA VIRGEN LAS ANGUSTIAS PARA CADA UNA