Cálida Llama que penetra mi alma,
amoroso Huésped, ven, Espíritu, y desciende.
Viento perdido que mi ser escrutas,
dulce Consolador, ven Espíritu, y desciende.
Agua cristalina que mi sed apaga,
eterno Manantial, ven, Espíritu y desciende.
Dulce Rocío que mi corazón bañas,
Renovadora Fuerza, ven, Espíritu y desciende.
Dádiva eterna que mi anhelo colmas,
infinito Don, ven, Espíritu y desciende.
Indeleble Sello que en el Amor me marcas,
Insondable Huella, ven, Espíritu, y desciende.
Ven, Espíritu Santo, ven y colma mi alma con el don de tu presencia.
Enciende mi corazón con la fuerza de tu Llama.
Ven y penetra mi ser con el Rocío de tu gracia.
Ven y llena mi vida con la fuerza de tu amor.
Espíritu Santo, ven y sobre mi desciende. Amén.