Al paso del Padre Jesús
por las calles de nuestro pueblo,
tú quieres hacerte presenteen todos los pozocamineros
iluminando las tinieblas de la noche
y rompiendo este silencio;
oyéndose un grito unánime
que se eleve hasta los cielos:
¡Jesús del GRAN PODER!,
ilumina nuestras vidas, tú que eres
LUZ DE LOS PUEBLOS.